Existen numerosos motivos para alcanzar una eficiencia óptima en el consumo energético de los hogares. No obstante, no todos pueden sufragar las reformas necesarias para lograr un aislamiento térmico ideal en las viviendas.
Es posible que sea por esta razón que cada vez adquiere mayor relevancia el aislamiento térmico de pared y la técnica de insuflación. Si estos conceptos no te resultan familiares, te invitamos a quedarte en este artículo, donde exploraremos en detalle este tema.
¿Qué tenemos?
Primero, veamos datos y medidas del Gobierno de España
Antes de sumergirnos en el tema, contextualicemos la utilidad del aislamiento térmico de pared, especialmente el aislamiento por insuflado en Madrid u otras ciudades españolas. Nos encontramos inmersos en una crisis energética que, lamentablemente, se ha intensificado debido al conflicto bélico en Ucrania. La energía, mayormente derivada de fuentes fósiles, continúa encareciéndose, privando a un número creciente de familias de la posibilidad de disfrutar de un hogar confortable tanto en invierno como en verano.
En este contexto, el gobierno ha anunciado recientemente un plan de ahorro energético que consta de 73 medidas, con el objetivo de reducir el consumo de gas en un 13%. Entre estas acciones se incluyen reducciones fiscales, transparencia en las facturas de luz y gas, así como protección para las comunidades de vecinos. Sin embargo, aún no se han detallado las medidas que impactarán directamente en los hogares españoles.
Existen datos que respaldan la importancia del desafío del ahorro energético en España:
Según la Red Eléctrica Española (REE), el consumo mensual promedio de un hogar en España alcanza los 270 kWh, lo que implica un consumo anual promedio de 3.272 kWh. El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) sitúa la cifra en 3.487 kWh, según su informe Consumos del Sector Residencial en España (2020-2019). Gran parte de este consumo energético está relacionado con la temperatura del hogar, especialmente la calefacción y el aire acondicionado, las dos soluciones más utilizadas por la población española.
Aquí entra en juego el aislamiento térmico por insuflado, una solución rápida, económica y muy efectiva. ¡Sigue leyendo!
¿Qué implica el aislamiento insuflado?
El término «aislamiento por insuflado» describe por sí mismo el procedimiento. Consiste en inyectar aislamiento a granel (pudiendo ser de diversos tipos) en las cámaras de aire cerradas, ya sea de fachadas, falsos techos o paredes. Este material aislante se distribuye de manera compacta y sin fisuras, desempeñando varias funciones:
- Aislante térmico.
- Impide la circulación del aire externo hacia el interior de la vivienda.
- Aislante acústico (según tipo de aislante)
¿Es el aislamiento insuflado una solución eficaz para mejorar la eficiencia energética del hogar?
El aislamiento insuflado es una solución eficaz cuando existe la posibilidad de realizar la insuflación. En algunos sistemas constructivos de décadas anteriores, era común dejar una cámara de aire, ya sea por razones constructivas, estéticas o térmicas.
Detectar una cámara de aire en viviendas anteriores a los años 70 resulta complicado. A partir de 1979, con la aparición de las Normas Básicas de Edificación y el Código Técnico de 1979, los requisitos de aislamiento aumentaron, y estas edificaciones suelen contar con cámaras de aire, aunque a veces con un aislamiento insuficiente para las demandas actuales. Fue a partir de 2006 que los requisitos de aislamiento se intensificaron.
Si identificamos una cámara de aire (tarea que puede llevar a cabo la empresa contratada), la insuflación se vuelve necesaria si buscamos ahorrar energía (especialmente en calefacción durante el invierno) y proteger la vivienda del calor en verano).
¿Existe alguna aislante térmico más ecológica que otro?
Nuestra recomendación es optar por aislamientos ecológicos, como la celulosa, la lana de roca, la lana mineral y la fibra de madera.
¿Se puede instalar en todo tipo de viviendas?
¡Claro que sí! Es viable y rentable. Al considerar aislar, por ejemplo, un piso, debemos prestar atención a dos áreas: las ventanas y las paredes, sobre todo aquellas que dan a la calle. Aislar un piso resulta mucho más económico que hacerlo en una vivienda unifamiliar, ya que no es necesario preocuparse por el techo ni el suelo, gracias a la presencia de vecinos, a menos que vivas en el ático. Además, existen numerosas ayudas para mejorar la eficiencia energética, cuya información la puedes encontrar en la entidad pública asignada en tu región.
En pocas palabras, es una alternativa viable y económica a medio plazo. Y, lo que es muy importante, es una forma sostenible de lograr una temperatura óptima en el hogar. Recordemos, por último, que mantener una temperatura óptima no implica necesariamente vestirnos con manga corta en pleno invierno, algo que lamentablemente ocurre más a menudo de lo que imaginamos.
El sentido común y acciones como el aislamiento insuflado en las paredes son nuestros grandes aliados.
Si resides en Vigo o en la provincia de Pontevedra y estás interesado en realizar la insuflación en tu hogar o negocio, no dudes en solicitarnos un presupuesto sin compromiso.
